martes, 8 de noviembre de 2011

Las once reglas para triunfar en el trabajo. Final



1. Nunca andes por la oficina sin algún documento en tus manos.
La gente con documentos en sus manos parece seria dirigiéndose a importantes reuniones. La gente que no lleva nada parece como que se dirigiera a la cafetería. Asimismo, si llevas un periódico parece que te encaminas al baño. Sobre todo, asegúrate que llevas montones de papeles cuando te vas a casa, así generarás la falsa impresión de que trabajas más horas de las que en realidad haces.

 
 2. Utiliza tu ordenador para parecer muy ocupado.
Siempre que utilizas el ordenador, a los que pasen por allí les parece que estás haciendo "trabajo". Puedes enviar y recibir correos personales, charlar y en general pasarte un buen rato sin hacer algo ni siquiera lejanamente relacionado con el trabajo. Estos no eran exactamente los beneficios sociales que los impulsores de la revolución informática esperaban, pero tampoco están nada mal. Cuando te pille el jefe - y seguro que te pillarán - tu mejor defensa es alegar que estás aprendiendo por tu cuenta nuevos programas, ahorrando a la compañía gastos de enseñanza.

 
3. Mesa de trabajo revuelta.
Los gerentes de la empresa son los únicos que pueden tener la mesa ordenada. Para el resto de nosotros, eso daría a entender que no trabajamos demasiado. Construye enormes montones de papeles alrededor de tu área de trabajo. Para el que pase por allí, los papeles viejos del año pasado son exactamente iguales que los de este año; es el volumen lo que importa. Haz torres altas y anchas. Si sabes de alguien que vaya a ir a tu cubículo, entierra el documento entre los montones y haz como que lo buscas cuando el/ella vengan a pedírtelo.

 
4. Contestador Automático.
Nunca contestes al teléfono si tienes un contestador automático. La gente no te llama para regalarte algo - te llaman para que TÚ les hagas trabajo a ELLOS. Así no se puede vivir. Comprueba todas las llamadas a través de tu contestador. Si alguien te ha dejado un mensaje y suena como a más trabajo, responde durante el descanso de la comida, justo cuando sabes que no están - darás la impresión de trabajar mucho y ser muy dedicado, cuando en realidad todo lo organizas para no dar ni golpe. 

 
5. Que parezcas impaciente y molesto.
Según George Costanza, uno siempre debería parecer impaciente y molesto para dar la impresión a tus jefes de que estás muy ocupado. 

 
6. Vete tarde de la oficina.
Siempre vete tarde de la oficina, especialmente si el jefe está ahí también. Y mientras esperas puedes leer revistas y libros que siempre querías leer pero para los que nunca encontraste tiempo. Asegúrate de pasar por delante de la oficina del jefe cuando te vayas. Envía importantes correos electrónicos a horas intempestivas (ejemplo 9:35pm, 7:05am, etc.) y los días de fiesta. 

 
7. Suspiros falsos para crear efecto.
Suspira ruidosamente cuando haya mucha gente alrededor, dando la impresión de que estás bajo presión extrema. 

 
8. Estrategia del amontonamiento.
No es suficiente con tener montones en la mesa. Pon muchos libros en el suelo etc. (los manuales gruesos de informática son los mejores)

 
9. Aprende vocabulario.
Léete algunas revistas de informática y apréndete la jerga y algunos productos nuevos. Utilízalo luego cuando hables con los jefes. Recuerda: no hace falta que te entiendan, pero asegúrate de que les impresionas.

 
10. Ten dos chaquetas.
Si trabajas en una gran oficina de diseño abierto, siempre deja una chaqueta de repuesto sobre el respaldo de tu butaca. Esto da la impresión de que estás aún en el edificio. La otra chaqueta la puedes utilizar mientras estés en cualquier otro sitio! 

 
11. LO MAS IMPORTANTE: NO le envíes este mensaje a tu jefe por error!!!!

sábado, 5 de noviembre de 2011

1. La secretaria es con frecuencia la primera persona de una empresa u oficina pública con la que se establece un contacto. Las cualidades que convienen a una secretaria son el buen carácter, la simpatía, la eficacia, la laboriosidad.

2. Eficacia y cortesía de la secretaria.- Debe establecer lo más claramente posible con su jefe los límites claros de su autonomía y de sus responsabilidades.Sabrá decir que no con amabilidad y firmeza. Conocerá perfectamente el protocolo de las llamadas telefónicas y sabrá escuchar atenta y pacientemente. Debe llevar la agenda de su jefe rigurosamente, advirtiéndole con la suficiente antelación de los compromisos pendientes.

3.La secretaria y el café.- Si hay una visita esperando, debe ser la secretaria quien se ocupe de ofrecerle café, revistas, etcétera. El café jamás se llevará servido, sino que se servirá directamente de la cafetera. Deberá usar un juego de café de buena porcelana, con su cafetera y una bandeja elegante. Para una secretaria no debe ser humillante servirle un café a su jefe.

4.La secretaria y la imagen del despacho.- Una secretaria se debe ocupar de que las plantas o flores que adornen el despacho estén siempre bien cuidadas. También de que los ceniceros estén convenientemente vacíos y limpios.

5.No se debe comer un sandwich en la oficina, ya que se corre el riesgo de que ésta huela a comida. Tampoco, desde luego, deberá mascar chicle.